Una crema muy interesante y gratificante, si tenemos en cuanta de que estos días nos vamos a pasar en nuestras dietas. Por lo que no estaría mal si incluyésemos un primer plato de esta crema de verduras, aderezada con queso fresco y unas pipas de girasol. Recomendamos emplear siempre agua mineral, para no encontrarnos con
sabores que no deseamos, además que en muchas zonas no siempre se tiene
una buena calidad de agua.
Ingredientes
Para 4 personas
1 puerro (solo la parte blanca).
1 patata grande.
100 gr. de judías verdes.
300 gr. de brócoli.
200 gr. de guisantes desgranados.
80 gr. de queso fresco.
20 gr. de pipas peladas de girasol.
aceite de oliva virgen.
agua mineral.
sal.
pimienta negra molida.
Elaboración
Limpiaremos el puerro, aprovechando solo la parte blanca, cortándola en rodajas. La parte verde podemos guardarla, para hacer otro día un caldo, por ejemplo.
Pelaremos la patata y la cortaremos a trozos.
Lavaremos las judías verdes y las cortaremos en trocitos.
Lavaremos y cortaremos en ramitos el brócoli.
Cortaremos el queso fresco en dados pequeños.
En una olla con 2 cucharadas de aceite de oliva pocharemos el puerro.
Cuando esté tierno, incorporaremos la patata, las judías verdes, los guisantes y la coliflor, rehogándolos durante 5 minutos.
Salpimentaremos y cubriremos todo con agua mineral. Taparemos la olla y la llevaremos a ebullición, dejándolo cocer, durante 20 minutos.
Trituraremos las verduras junto con parte del caldo de la cocción. Si la crema obtenida resultase muy espesa, le añadiremos más caldo, rectificando de sal y pimienta.
Serviremos la crema en boles individuales, repartiendo por encima los dados de queso y las pipas, agregándoles 1 hilillo de aceite de oliva virgen por encima.
Podemos acompañarla con alguna pasta salada de hojaldre (opcional).