Una ensalada refrescante con un toque crujiente de las nueces que combinan excelentemente con las manzanas y el queso.
Ingredientes
100 gr. de rúcula.
unas hojas de lechuga romana.
2 manzanas.
1/2 limón (su zumo).
100 gr. de nueces peladas.
50 gr. de queso manchego semi seco en láminas.
Para la vinagreta:
2 cucharadas de mermelada de arándanos.
2 cucharadas de vinagre balsámico.
2 cucharadas de aceite de oilva virgen extra.
sal.
Elaboración
Lavaremos la rúcula y la lechuga, escurriéndolas bien.
Lavaremos las manzanas y las secaremos bien.
Para la vinagreta:
Mezclaremos la mermelada de arándanos con el vinagre balsámico y el aceite de oliva virgen extra, emulsionándolo bien, empleando unas varillas, reservándola.
Sazonaremos la rúcula y la lechuga, repartiéndolas en platos individuales.
Cortaremos las manzanas en rodajas o en gajos (podemos hacer ambas cosas), rociándolas con unas gotas de zumo de limón y colocándolas sobre las lechugas.
Repartiremos las nueces troceadas y unas láminas de queso semi seco.
Para la vinagreta:
Mezclaremos la mermelada de arándanos con el vinagre balsámico y el aceite de oliva virgen extra, emulsionándolo bien, empleando unas varillas, reservándola.