Un clásico entre los clásicos. El flan de huevo por excelencia al que reforzamos con el caramelo . Sabroso y que podemos consumirlo, tal cual, o acompañándolo con nata montada.
Ingredientes
750 ml. de leche entera.
1 vaina de vainilla.
180 gr. de azúcar.
5 huevos.
sal.
4 cucharadas de agua mineral.
8 flaneras pequeñas o una rectangular
Elaboración
Llevaremos a ebullición la leche, junto con la vaina de vainilla cortada a lo largo, a fuego medio. La retiraremos de inmediato y la taparemos.
Para preparar el caramelo, pondremos 100 gr. de azúcar, una pizca de sal y 4 cucharadas de agua en un cazo de fondo grueso.
Calentaremos el cazo hasta que el azúcar adquiera un color de caramelo oscuro. Lo retiraremos del fuego y cuando deje de chisporrotear, lo verteremos en los moldes o en el molde rectangular con cuidado de no quemarnos.
Colocaremos los moldes, o el molde, en una fuente de ir al horno y añadiremos agua hirviendo cubriéndolos hasta la mitad por fuera, para después hacer al baño María.
Añadiremos los 80 gr. de azúcar restante y la pizca de sal, al cazo de la leche templada hasta disolverlo todo.
Retiraremos la vainilla.
En un bol, batiremos bien los huevos.
Le añadiremos la leche templada removiéndolo todo bien y llenaremos los moldes, o el molde.
Pondremos la bandeja en el horno, previamente calentado a 180º C. y los hornearemos al baño María durante unos 25 minutos, hasta que hayan cuajado, para ello clavaremos un cuchillo, éste nos debe de salir limpio.
Dejaremos que se pongan a temperatura ambiente y los desmoldearemos sirviéndolos en un plato y rodeados del caramelo.Si lo hemos elaborado en el molde rectangular, lo serviremos cortándolo en lonchas un poco gruesas, regándolas también con el caramelo.