Las trufas son un dulce que a todos los amantes del chocolate les "chiflan". Un bocado que se funde en la boca. Las trufas siempre se comen heladas, por eso se tienen que poner en el congelador una vez hechas, y sacarlas en el momento que las tengamos que degustar.
Ingredientes
250 gr. chocolate postres para fundir
50 gr. de mantequilla
200 ml. de nata 35% materia grasa
50 gr. de azúcar glas.
3 cucharadas de brandy.
50 gr. de cacao en polvo.
Elaboración
Pondremos a calentar un cazo en el fuego con la nata sin que llegue a hervir.
Añadiremos la mantequilla cortada para que se incorpore mejor. La iremos removiendo con unas varillas.
Pondremos la nata en un bol al baño María e iremos añadiendo poco a poco el chocolate troceado para que se vaya fundiendo.
Fuera del baño María, batiremos bien la mezcla, añadiéndole el azúcar glas y el brandy.
Dejaremos reposar en la nevera un mínimo de 4 horas, para que la masa coja consistencia para poderla trabajar y darle forma.
Haremos las porciones con una manga o con una cucharilla, depositándolas sobre el cacao en polvo.
Les daremos forma con las manos y las pondremos en cápsulas individuales.
Las pondremos en el congelador hasta el momento de servir.