Unas excelentes sopas de ajo, muy populares en tierras vascas, que se preparan con bacalao desmigado, pan, un punto picante y la pulpa de los pimientos choriceros, acabando el plato, una vez la hemos puesto en el plato poniendo un huevo en cada uno.
Ingredientes
Para 4 personas
250 gr. de bacalao desmigado
4 dientes de ajo
1/2 guindilla
4 pimientos choriceros
1 barra de pan
4 huevos
aceite de oliva
Elaboración
Pondremos el bacalao desmigado en agua, durante 24 horas en la nevera. Lo escurriremos y reservaremos el agua del desalado.
Cortaremos el pan en rebanadas, tostándolas en una tostadora o en el horno.
En una cazuela, pondremos aceite de oliva y los dientes de ajo picados.
Cuando empiecen a tomar color, añadiremos el bacalao, bien escurrido, agitaremos la cazuela y añadiremos, poco a poco, agua del desalado, ligándolo un poco como si hiciésemos un pil-pil.
Añadiremos 1/2 guindilla y 4 cucharadas de carne de pimientos choriceros (envasado o de 4 pimientos choriceros en remojo).
Incorporaremos las rebanadas de pan tostado cortadas en cuadraditos y un poco más de agua del desalado, según se quiera mas o menos espesa.
Dejarlo cocer lentamente, durante 30 minutos, zarandeando la cazuela, de vez en cuando.
La dejaremos reposar un mínimo de 2 horas.
Volveremos la sopa al fuego y escalfaremos 1 huevo encima, por cada comensal.