Un plato muy tradicional, en el que guisaremos el bacalao con las patatas, pero con la diferencia de que el bacalao lo rebozaremos primero, para guisarlo después con las patatas.
Ingredientes
Para 4 personas
4 trozos de bacalao (que lleve espinas).
4 patatas.
1 cebolla.
2 dientes de ajo.
caldo (hecho con las espinas y la piel del bacalao).
1 huevo batido (para rebozar).
harina (para rebozar).
3 cucharadas de salsa de tomate.
aceite de oliva.
sal.
perejil picado.
4 huevos cocidos (para acompañar).
Elaboración
Pondremos el bacalao en remojo, en un recipiente con agua, durante 7 días en la nevera. Vaciaremos el agua, poniendo agua nueva. La cambiaremos 2 o 3 veces más cada 24 horas.
Retiraremos la piel y las espinas. Con ellas haremos un caldo, en un cazo con agua mineral y perejil, durante 15 minutos. Lo colaremos y reservaremos en caliente, a fuego muy lento, cercano a la temperatura de ebullición.
Pelaremos las patatas y las cortaremos en rodajas de 0,5 cm. de grosor.
Picaremos la cebolla y 2 dientes de ajo, rehogándolos en una cazuela con aceite caliente y sal, durante unos 15 minutos, a fuego suave.
Añadiremos las patatas cuando la cebolla empiece a transparentarse , rehogándolas 2 minutos más.
Agregaremos perejil picado y las cubriremos con el caldo anterior caliente, dejándolas cocer durante 20 minutos a fuego suave.
Mientras, rebozaremos los trozos de bacalao con harina y huevo batido, friéndolos en una sartén con aceite de oliva caliente, apenas 1 minuto por cada lado.
Incorporaremos el bacalao y la salsa de tomate al guiso, dejándolo cocer durante 5 minutos más, zarandeando la cazuela de vez en cuando, para que se trabe la salsa.
Los acompañaremos con 1 huevo duro partido por la mitad a lo largo, por cada comensal, espolvoreando todo con perejil picado.