Estos deliciosos bocados los haremos con pescado blanco, sencillos de elaborar y dependiendo del pescados que empleemos, nos puede salir muy económico. Podemos acompañarlos con lo que más nos apetezca, unas ensaladas de lechugas, patatas fritas, etc. En nuestro caso y como suelen hacerlo por tierras alemanas, haremos dos salsas que serviremos en boles individuales aparte, una base de yogur con mostaza, hierbas, pimienta y pimentón dulce. La otra con leche agria con nata, pimiento y sal de hierbas, buenísimas, os encantarán.
Ingredientes
1 kg. de filetes de pescado blanco
2 cucharadas de zumo de limón
sal y pimienta negra recién molida
2 huevos
150 gr. de pan rallado
200 gr. de yogur
3 cucharadas de mostaza dulce
sal de hierbas
pimentón dulce
200 ml. de leche agria
1 cucharada de nata
1 pimiento rojo
aceite de oliva
Elaboración
Lavaremos los filetes de pescado y los secaremos. Los cortaremos del tamaño de un bocado, rociándolos con el zumo de limón.
Batiremos los huevos.
Pasaremos los bocados por el huevo batido y luego por el pan rallado.
En una sartén con aceite bien caliente, freiremos los bocados, hasta que estén dorados por todos los lados, dejándolos escurrir sobre papel absorbente. Los mantendremos en lugar caliente, por ejemplo en el horno previamente calentado a 80ºC.
Prepararemos una de las salsas, mezclando en un bol el yogur con la mostaza, sazonándola con la sal de hierbas, la pimienta y el pimentón dulce, hasta obtener una mezcla homogénea.
Haremos la otra salsa, mezclando la leche agria con la nata.
Partiremos el pimiento y lo cortaremos en cuadritos, incorporándolos a la salsa, sazonándolo con un poco de sal de hierbas y pimienta negra.
Serviremos los bocados de pescado, acompañados en salseras aparte ambas salsas.