Una forma gratificante de comer unos canelones. Fáciles de elaborar y que a nuestros hijos pueden gustarles mucho.
Ingredientes
20 placas de canelones
50 gr. de mantequilla
40 gr. de harina
350 cl. de leche
200 gr. de jamón York
50 gr. de bacon
100 gr. de xampiñones
1 huevo
sal
nuez moscada
Para el rebozado:
harina
2 huevos
150 gr. de pan rallado
canela
unas gotas de limón
sal
Elaboración
En un cazo se hace una bechamel espesa con la mantequilla, la harina y la leche.
Se mezcla el jamón York, el bacon y los champiñones que antes habremos triturado; se añade nuez moscada y se deja cocer durante 5 minutos, sin parar de remover con una cuchara de madera.
Una vez cocido se quita del fuego, se prueba de sal y se le añade 1 yema de huevo, reservando la clara, y se deja enfriar.
Colocamos una olla al fuego con abundante agua salada y un chorrito de aceite, y se van echando las placas de canelones una a una, el tiempo que nos indique el envoltorio ; cuando estén cocidas las escurrimos y pasamos por agua fría, las volvemos a escurrir y las dejaremos encima de un paño de cocina.
Ponemos 1 cucharada del relleno en cada placa de canelón y se envuelve de forma cilíndrica.
En un plato batimos ligeramente los huevos y les agregamos la clara del huevo que nos ha sobrado antes, sazonándolo con un poco con sal, canela y unas gotas de limón.
Se pasan los canelones por un plato con harina, se sumergen en el huevo y se rebozan con el pan rallado.
Los freiremos en abundante aceite de oliva caliente y cuando estén dorados, los dejaremos encima de papel absorbente.
Los colcaremos en una bandeja para poder ir a la mesa.
Se pueden acompañar con alcachofas fritas, ensalada variada, verduras salteadas, etc.