Este plato se acostumbra a comer en invierno que es cuando más calorías nos pide el cuerpo para combatir el frío. Aunque también se puede comer como entrante, en un vermut los domingos, es costumbre tomar una ración de cap i pota. Hay personas que no les gusta por su textura, pero a otras les encantan. Además, la haces el día anterior y aún está más buena .
Ingredientes
Para la capipota:
250 ml. de caldo de ternera.
500 gr. de capipota cocida (cabeza y pata de ternera)
100 gr de garbanzos cocidos.
Para el sofrito:
1 cebolla de Figueres.
3 dientes de ajo.
30 gr de jamón serrano.
15 gr. de cecina.
1/2 kg de tomates maduros.
1/2 cucharadita de pimentón dulce.
1/2 cucharadita de pimentón picante.
1 hoja de laurel.
1 ramita de tomillo.
1 ramita de romero.
45 gr. de uvas pasas.
40 gr. de piñones.
100 ml. de vino rancio.
80 ml. de aceite de oliva.
6 gotas de tabasco.
sal.
pimienta negra recién molida.
Elaboración
En una cazuela con aceite de oliva, sofreiremos los dientes de ajo picados.
Cuando empiece a dorarse incorporaremos la cebolla trinchada, la hoja de laurel, la ramita de tomillo, la ramita de romero, el jamón serrano picado, la cecina picada y un poco de sal, dejándolo sofreir todo, a fuego suave, durante 20 minutos.
Seguidamente añadiremos los 2 pimentones, dulce y picante, el tomate rallado y unas gotas de tabasco, dejándolo cocer, a fuego medio, durante 30 minutos.
Mientras en una sartén con un poco de aceite de oliva, saltearemos los piñones y las uvas pasas. Cuando empiecen a tomar color, agregaremos el vino rancio, dejándolo reducir, hasta que adquiera una textura de jarabe y se haya evaporado el vino rancio, agregándolo de inmediato a la cazuela, removiéndolo bien.
Incorporaremos los garbanzos cocidos y la capipota cocida, que habremos cortado en dados. Los salpimentaremos y los rociaremos con el caldo de ternera, dejándolo cocer todo, durante 15 minutos, dándoles alguna vuelta de vez en cuando.
Presentar en la misma cazuela.
Podemos presentarlo también en cazuelitas individuales.