Ya los tenemos aquí. Esta verdura de invierno, tan característica en tierras aragonesas. Las solemos cocinar con un a salsa de almendras crudas muy sabrosa. Os la recomiendo. Si viajáis por Aragón, los encontraréis en muchos de sus excelentes restaurantes. En algunos los guisan también con almejas. De todas las maneras, están apetitosos.
Ingredientes
1 kg. de cardo.
2 dientes de ajo.
40 gr. de almendras crudas.
4 cucharadas de aceite de oliva.
2 cucharadas de harina.
sal.
perejil picado.
Elaboración
Pelaremos las pencas de cardo eliminando las hebras.
A medida que las pelemos, las frotaremos con limón, las cortaremos a trozos y los sumergiremos en agua a la que le añadiremos el zumo de un limón.
Llenaremos una olla de agua, le agregaremos 1 cucharada de harina y otra de sal y las pencas de cardo. Las pondremos al fuego dejándolas cocer durante 1 hora o hasta que estén tiernas.
Moleremos las almendras crudas y las reservaremos.
Filetearemos los ajos, dorándolos en una cazuela con aceite de oliva.
Añadiremos 1 cucharada de harina, removiéndola con una cuchara de madera.
Agregaremos el cardo cocido y las almendras molidas, removiéndolo para que se ligue bien la salsa.
Regaremos el conjunto con el caldo de la cocción, hasta conseguir una crema trabada, dejando que los cardos suelten sus líquidos.
Rectificaremos de sal y los dejaremos cocer a fuego suave, durante 15 minutos más.
Los serviremos, espolvoreándolo con perejil picado por encima.