Uno de los platos más clásicos de la cocina china, en la que combinaremos pollo, con cebolletas, tomate, huevos, brotes de judías, aromatizado con el jengibre y la soja.
Ingredientes
175 gr. de pechuga de pollo, pelada y deshuesada.
2 cucharadas de aceite vegetal.
5 cebollas tiernas.
1 trozo de jengibre fresco.
2 dientes de ajo.
1 cucharada de tomate triturado.
2 cucharadas de jerez seco.
2 cucharadas de salsa de soja.
1 cucharadita de azúcar.
8 cucharadas de agua mineral.
300 gr. de brotes de judías.
3 huevos batidos con 2 cucharadas de agua mineral.
Elaboración
Calentaremos 1 cucharada de aceite en el wok.
Añadiremos las cebollas tiernas picadas, el jengibre fresco pelado y picado, friéndolo 1 minuto.
Incorporaremos el ajo machacado y la pechuga de pollo pelada y cortada en tiras pequeñas, salteándola durante 2 minutos.
Bajaremos el fuego y añadiremos el tomate triturado, el jerez, la salsa de soja, el azúcar y 5 cucharadas de agua. Lo calentaremos despacio y lo reservaremos sobre un plato templado.
Calentaremos el resto del aceite sobrante del wok, agregando los brotes de judías y el resto del agua, friéndolo y removiéndolo bien, durante 3 minutos.
Lo incorporaremos al plato anterior reservado en caliente.
Limpiaremos el wok y calentaremos la otra cucharada de aceite.
Incorporaremos los huevos batidos, cociéndolos hasta que estén crujientes.
Los colocaremos encima de los brotes de judías y serviremos de inmediato.