Este plato podemos considerarlo como único, por las carnes y verduras que aporta. En Portugal se hace como nuestros típicos cocidos, pero ellos aportan un embutido, el salpicâo, que está elaborado con lomo entero, una especie de lomo embuchado y un apartado que hacen con arroz, por eso es un cocido muy expectacular . Ahora que nos vienen los frios, podemos aprovecharlo para hacer ese excelente cocido.
Ingredientes
1/2 gallina.
600 gr. de carne de ternera. (morcillo)
2 huesos de caña. (tuétano)
300 gr. de oreja de cerdo.
125 gr. de jamón serrano en un trozo.
1 salpicâo. (embutido hecho de lomo entero)
1 chorizo.
1 morcilla.
1 col, repollo.
2 zanahorias.
5 patatas medianas.
4 nabos medianos.
250 gr. de judías verdes.
1 cebolla.
350 gr. de arroz.
3 cucharadas de aceite de oliva.
sal.
pimienta negra molida.
3 l. de agua mineral.
Elaboración
En una olla grande, colocaremos los huesos de caña (tuétano) y la carne de morcillo de ternera, cubriéndolos con agua mineral fría.
Cuando empiece a hervir, iremos retirando la espuma que se forme con una espumadera, hasta que nos quede el caldo limpio.
Agregaremos 500 ml. más de agua mineral, sal y pimienta negra.
Cuando la carne esté tierna (unos 45 minutos), retiraremos la carne y los huesos, reservándolos en un recipiente tapado.
Introduciremos en la olla la gallina, dejándola cocer 30 minutos más. Una vez tierna, la retiraremos y reservaremos en el recipiente tapado anterior.
Pondremos la oreja de cerdo, el jamón serrano, el salpicâo, el chorizo, la morcilla, dejándolos cocer 45 minutos más. Los retiraremos y reservaremos en el mismo recipiente, tapados, manteniéndolos en caliente.
Finalmente incorporaremos la col troceada, las zanahorias, cortadas en trozos grandes, las patatas, peladas y cortadas en trozos grandes, los nabos, pelados y cortados por la mitad y las judías verdes cortadas en trozos grandes, dejándolos cocer durante unos 20 minutos, reservándolo en caliente.
Pelaremos y picaremos la cebolla.
En una cazuela de barro que pueda ir al horno, pocharemos la cebolla, en aceite de oliva, hasta que esté tierna y transparente.
Cuando haya tomado color, agregaremos el arroz, tostándolo a fuego vivo, hasta que quede translúcido.
Verteremos el caldo de la cocción, el doble de volumen que de arroz y un poco más, salpimentándo y llevándolo a ebullición.
Introduciremos la cazuela en el horno precalenado a 100ºC. , hasta que se haya consumido todo el caldo (unos 20 minutos).
Serviremos el arroz con los embutidos y las zanahorias, cortados en rodajas y en otra bandeja las carnes con el resto de las verduras.