Una buena combinación de sabores. Una col y las judías blancas, que, una vez cocidas las saltearemos con la grasa del tocino y el aroma del ajo. Lo presentaremos en un molde de aro y decorado con el tocino frito. Después lo acompañaremos con los arenques.
Ingredientes
Para 4 personas
1 col de invierno grande.
400 gr. de judías blancas.
3 lonchas de tocino enverado.
1 diente de ajo.
4 arenques salados.
sal.
aceite de oliva.
Elaboración
Limpiaremos la col y la coceremos en una olla con agua con sal. Cuando esté tierna (unos 20 minutos), la colaremos y la trincharemos, reservándola.
Las judías blancas, las habremos puesto en remojo la noche anterior. Las coceremos en una cacerola, cubriéndolas de agua fría. Cuando arranque el hervor, las colaremos y repetiremos la operación, cubriéndolas de nuevo con agua fría, dejándolas cocer lentamente (como mínimo 45 a 60 minutos), hasta que empiecen a estar blandas, añadiendo de vez en cuando, más agua fría, evitando de que se despellejen y se deshagan. Las escurriremos y reservaremos.
En una sartén con muy poco aceite, freiremos las lonchas de tocino. Las reservaremos.
Con la misma grasa, freiremos la col trinchada.
Seguidamente, incorporaremos las judías, salteándolas para que no se nos forme una pasta, dejándolas en la sartén, hasta que se nos forme una fina capa de costra dorada.
Finalmente, añadiremos el ajo picado, para darle un aroma excepcional.
Rellenaremos unos moldes de aro, sobre los platos de servir y lo decoraremos con el tocino frito cortado en trozos grandes.
Este plato lo acompañaremos con unos arenques salados, a los que eliminaremos la piel y las espinas, aliñándolo con un chorro de aceite de oliva.