Para aquellos que no disfrutan demasiado con las verduras, prepararemos de una manera muy diferente una coliflor. Primero la coceremos, y luego, una vez rebozada la freiremos.
Ingredientes
Para 4 personas
1/2 kg. de coliflor
50 gr. de mantequilla
50 gr. de harina
3 huevos
400 ml. de leche
pan rallado
aceite de oliva
sal
perejil
harina para rebozar
Elaboración
Limpiaremos la coliflor, quitándole las hojas exteriores y sacando ramitos individuales. Para ello, cogeremos un cuchillo y los vamos cortando a ras del tallo.
Los pondremos en una olla con agua y sal, a hervir, durante unos 15 a 20 minutos (dependiendo de como esté la coliflor de dura tardará más o menos tiempo), hasta que esté blanda.
Derretiremos la mantequilla en una cacerola y cuando esté fundida, añadiremos la harina, mezclándola bien y luego iremos agregando, poco a poco, la leche, hasta que la absorba toda, dejándola cocer, sin dejar de remover, durante 5 minutos, hasta que espese. Salpimentaremos y añadiremos perejil picado.
Escurriremos la coliflor, enfriándola con agua, para parar la cocción, escurriéndola bien de nuevo.
Iremos cogiendo cada ramito de la coliflor, empapándolo bien, en la bechamel, bien con un palo de brocheta, o bien con las manos.
Los dejaremos enfriar encima de una placa de horno, tabla de cocinar, etc.
Una vez fría la coliflor con la bechamel, la empanaremos con harina, huevo batido y pan rallado y las freiremos en una sartén con abundante aceite. Al sacarla, la dejaremos escurrir un rato en papel de cocina, para que suelte el aceite. Servir caliente.