Hace unos días tuve la oportunidad de saborear estas exquisitas galletas de orejones, en un buen restaurante de la provincia de Lleida y estaban riquísimas. Las podemos acompañar con algún vino dulce, como un moscatel o una mistela, también con un buen vino rancio.
Ingredientes
Para 6 personas
160 gr. de mantequilla reblandecida
185 gr. de azúcar
2 cucharadas de mermelada de naranja
1 cucharadita de vainilla en polvo
200 gr. de orejones de albaricoque
125 gr. de harina de fuerza
40 gr. de harina de repostería
azúcar glas (opcional)
Elaboración
Batiremos la mantequilla con el azúcar, en la batidora, hasta dejarla cremosa.
Añadiremos la mermelada de naranja, los orejones de albaricoque, partidos en trocitos, mezclándolo bien.
Incorporaremos seguidamente las harinas tamizadas y la vainilla, amasándolas con las manos, hasta que se integren bien los ingredientes, quedándonos una masa suave.
Dividiremos la masa en 2 partes y formaremos 2 cilindros, que envolveremos con papel parafinado, reservándolos en el frigorífico, hasta que se endurezcan.
Cuando estén listos, les quitaremos el papel y los cortaremos en rodajas de 1 cm. de grosor, con un cuchillo de sierra, colocándolas, separadas, en una bandeja de horno forrado con papel.
La introduciremos en el horno precalentado a 180º C., de 10-15 minutos o hasta que estén doradas.
Las dejaremos reposar en la bandeja, unos 5 minutos y luego las dejaremos que se enfríen en una rejilla metálica.
Haremos 2 hornadas.
Mientras hacemos una hornada, el otro cilindro lo dejaremos en el frigorífico.
Cuidando que no se nos quemen. Cuando las vamos a sacar, parecen que están blandas, pero luego, cuando se enfrían se endurecen.
Opcionalmente podemos espolvorearlas con azúcar glas.