Antiguamente solíamos tomar estos postres cuando hacía calor. Esta tradición se ha acabado y por suerte podemos saborear helados, sorbetes y granizados, aunque haga frío. Este granizado en concreto os va a encantar. Si queremos que lo prueben los niños, eliminaremos el ron.
Ingredientes
1 piña tropical.
2 limones verdes. (su piel y su zumo)
100 ml. de jugo de piña.
50 ml. de ron.
70 gr. de azúcar de caña.
100 ml. de agua mineral fría.
1 ramito de menta fresca.
Elaboración
Pelaremos la piña y retiraremos la parte leñosa de la pulpa.
Reservaremos 400 gr. de la pulpa y el resto lo cortaremos en dados pequeños, reservándolos.
Lavaremos los limones y retiraremos la piel con un cuchillo.
Exprimiremos el zumo,reservándolo.
Lavaremos y secaremos las hojas de menta. Las picaremos muy menudas, reservando algunas enteras, para la decoración.
Cortaremos los 400 gr. de pulpa a trozos y los mezclaremos con el jugo de piña, el ron, la piel de limón, el azúcar y el zumo de los limones.
Añadiremos 100 ml. de agua mineral fría y lo batiremos, hasta obtener un puré fino.
Incorporaremos las hojas de menta picada, mezclándolas bien.
Verteremos el batido en un recipiente para congelar plano, hasta una altura de 2,5 cm. del borde, introduciéndolo en el congelador, durante 90 minutos.
Lo sacaremos del congelador, y lo batiremos con las varillas o con un tenedor, hasta que esté suave, volviéndolo a introducir en el congelador, hasta que esté cuajado (unos 90 minutos más).
Removeremos el granizado con el tenedor y lo repartiremos en vasos de cristal, decorándolos con los daditos de piña reservados y unas hojitas de menta fresca, dejándolos en la nevera unos 15 minutos antes de servir.