Los médicos siempre nos recomiendan que la primera comida del día sea importante, debido a que nuestro cuerpo ha estado más horas sin alimento. Hay un refrán que dice "Almuerza como un rey, come como un príncipe y cena como un pobre". Nos lo agradecerá nuestro cuerpo. Esta vez nos vamos a preparar unas buenas hamburguesas.
Ingredientes
Para 4 personas
4 panecillos redondos para hamburguesas
1 panecillo del día anterior
120 ml. de leche tibia
600 gr. de carne picada de cerdo
2 cucharadas de panceta ahumada en daditos
10 gr. de copos de cebolla frita
2 huevos
20 gr. de pimienta verde
1 cucharada de mostaza
1 cucharada de guindilla dulce picada
1 pizca de guindilla molida
sal
pimienta negra molida
Para la guarnición:
4 lonchas de beicon
800 gr. de judías blancas cocidas
4 huevos
4 lonchas gruesas de queso Cheddar
Elaboración
Elaboraremos las hamburguesas, cortando el panecillo del día anterior en dados.
Los remojaremos en un bol con la leche, durante 10 minutos.
Los escurriremos bien y los mezclaremos con la carne picada de cerdo, la panceta ahumada, los copos de cebolla, los huevos, la pimienta verde picada, la mostaza, la guindilla picada, la guindilla molida, sal y pimienta negra al gusto.
Con las manos humedecidas, formaremos 4 hamburguesas.
Las freiremos en una sartén durante unos 4 minutos por cada lado.
Abriremos los panecillos y los tostaremos en el grill del horno, por la parte de la miga.
Prepararemos la guarnición, asando el beicon en una sartén sin aceite, hasta que esté crujiente. Lo dejaremos escurrir sobre papel absorbente.
Calentaremos las judías blancas.
En una sartén con aceite freiremos los huevos.
Montaremos la hamburguesa, poniendo 1 tira de beicon crujiente en la base de cada panecillo. Encima pondremos la hamburguesa. Repartiremos las judías blancas, poniendo encima la locha de queso.
Para terminar, y con mucho cuidado, pondremos el huevo frito, espolvoreándolo con una pizca de guindilla molida, cubriéndolo con la otra mitad del panecillo. Servir de inmediato.