Un buen desayuno, para los que prefieren los de cuchillo y tenedor. Tan sencillo como vaciar unos panecillos, que humedeceremos su interior con leche caliente y poniendo un fondo de jamón picado. Encima cascaremos los huevos. Freiremos los panecillos en una sartén con aceite, bañando por encima el aceite caliente, para cuajar la clara.
Ingredientes
Para 4 personas
4 panecillos redondos.
4 huevos.
1/4 l. de leche.
100 gr. de jamón serrano.
aceite de oliva.
lechuga.
sal.
pimienta negra molida
Elaboración
Cortaremos la parte superior de los panecillos y sacaremos la miga de pan con 1 cucharilla.
En un cazo calentaremos la leche y cuando esté caliente, la verteremos en el interior de los panecillos, dejándolos empapar, durante 10 minutos.
Picaremos el jamón, muy menudo y lo repartiremos entre los panecillos.
Cascaremos los huevos, colocándolos dentro de cada panecillo, salpimentándolos.
En una sartén con aceite muy caliente, freiremos los panecillos, hasta que estén bien dorados.
En ese momento, echaremos el aceite caliente con la espumadera y cuando esté cuajada la clara, los sacaremos y dejaremos escurrir sobre papel absorbente.
Lo presentaremos colocando la lechuga, cortada en juliana, sobre una fuente y encima colocaremos los panecillos.
Servirlos de inmediato.