Para esta receta, partiremos de una lubina salvaje, aunque si no disponemos de ella, podemos sustituirla por varias de ración. La diferencia se nota en el sabor y textura de la primera, es mucho mejor. La cocinaremos de la manera más sencilla. Debemos tener en cuenta de que primero cocinaremos las verduras, para que nos queden todas las texturas correctas.
Ingredientes
lubina de 1,2 kg.
3 patatas.
1 pimiento verde.
1 tomate.
1 cebolla.
2 dientes de ajo.
1 vaso de vino blanco seco.
aceite de oliva.
sal.
pimienta negra molida.
perejil.
mantequilla (para untar).
1/2 l. de agua mineral.
Elaboración
Colocaremos sobre la bandeja del horno untada con mantequilla, las patatas peladas y cortadas en rodajas finas.
Cortaremos la cebolla, el pimiento verde y el tomate pelado, en juliana fina y los dientes de ajo los laminamos.
Los incorporaremos a la fuente encima de las patatas, regándolo todo con un buen chorro de aceite de oliva, 1 vaso de vino blanco y lo salpimentaremos.
Introduciremos la fuente en el horno precalentado, a 200ºC., durante 15 minutos aproximadamente.
Limpiaremos la lubina, retirando la cabeza y la espina central, abriéndola por la mitad.
En un cazo pondremos las espinas, la cabeza, 1 rama de perejil y un poco de sal y 1/2 l. de agua mineral y haremos un caldo ligero, dejándolo hervir 15 minutos.
Salpimentaremos los lomos de la lubina, colocándolos encima de las verduras que habremos retirado del horno momentáneamente.
Rociaremos con un poco del caldo anterior y un buen chorro de aceite de oliva.
Lo introduciremos en el horno, subiéndolo a 220º C., durante 10 minutos.
Pondremos las verduras encima de una fuente y sobre éstas la lubina.
Añadiremos un poco de perejil picado a los jugos que ha soltado la cocción, lo removeremos y salsearemos por encima de todo.