Por qué no preparar unos macarrones, como primer plato para estas fiestas. Son económicos y encima con esta receta, disfrutareis como niños. Como setas, si no tenemos de temporada, podeis emplear de cultivo, como el portobello, el sitake, la seta de cardo o el champiñón. Y, si me apurais un poco, haria una mezcla de varias de ellas. También podemos encontrarlas en conserva.
Ingredientes
400 gr. de macarrones
1/2 kg. de setas de temporada frescas o en conserva, variadas
2 cebollas picadas
1 diente de ajo
1 ramito de perejil
1 dl. de aceite de oliva
1/2 kg. de tomates maduros
125 gr. de jamón serrano
30 gr. de mantequilla
50 gr. de queso rallado
1 cucharada de pan rallado
sal
Elaboración
En una cacerola, con abundante agua hirviendo con sal, coceremos los
macarrones, partidos en trozos, el tiempo que nos indique el envoltorio. Los lavaremos y escurriremos, reservándolos.
Limpiaremos muy bien las setas, si son frescas, si son en conserva, las sacaremos del envase y las escaldaremos en agua hirviendo, para quitarle el sabor a conserva, picándolos en trozos pequeños, en ambos casos.
En una cazuela pondremos el aceite de oliva, calentándolo y añadiendo las cebollas picadas, el ajo, el perejil, las setas y el jamón cortado en cuadritos, sazonándolos con un poco de sal. Taparemos la cazuela, dejándolas al fuego, para que se vayan haciendo lentamente.
A los 5 minutos, agregaremos el tomate, previamente escaldado, eliminada la piel y semillas, cortado en cuadritos.
Lo dejaremos estofar, hasta que las setas estén tiernas.
En una tartera honda de gratinar, mezclaremos los macarrones con las setas y un poco de queso rallado, echando en la superficie el resto de queso, mezclado con 1 cucharada de pan rallado.
Añadiremos por encima unas bolitas de mantequilla y los meteremos en el horno a gratinar, para que se haga una costra dorada.