Aprovecharemos de que aun tenemos mandarinas, ya que están a punto de que se termine la temporada, las caramelizaremos en un baño de almíbar. Procuraremos que sean de la clase que no tiene semillas y las haremos en gajos. Si fuesen muy pequeñas, podemos pelarlas y carameliz arlas enteras.
Ingredientes
Para 4 personas
1/2 kg. de mandarinas (sin semillas)
1 kg. de azúcar
1/2 l. de agua mineral
1 limón (su zumo)
Elaboración
En un cazo, pondremos a hervir el agua con el azúcar, hasta que empiece a tomar un poco de color dorado.
En ese momento, exprimiremos encima, unas gotas de zumo de limón.
Bajaremos la intensidad del fuego al mínimo e iremos pasando por este caramelo los gajos de las mandarinas.
Las dejaremos escurrir bien, para que la capa que los recubre no sea muy gruesa, tratando de colocarlos ordenadamente y sin tocarse entre ellos, sobre una rejilla de malla lo más ancha posible, untada con un poco de aceite.
Lo que queremos lograr es que el caramelo escurra lo más rápido posible y los gajos no se peguen a la rejilla.
A continuación los colocaremos en el plato y ya están listos para comer.