Para los buenos gourmets, este postre os va a encantar. La mezcla de melón asado y la suma de un queso azul más las cucharadas de gelatina de vino dulce, lo hacen realmente exquisito.
Ingredientes
8 cortes de melón.
40 gr. de azúcar moreno.
100 gr. de queso azul.
200 gr. de vino dulce de Oporto.
1 hoja de gelatina (2 gr.)
Elaboración
Cortaremos 8 trozos de melón y de cada corte, lo cortaremos en 4 partes, eliminándoles la piel.
Pondremos los trozos de melón en una bandeja forrada con papel de hornear, espolvoreándolos con el azúcar moreno.
Introduciremos la bandeja en el horno precalentado a180ºC. durante 15 minutos.
Retiraremos la bandeja del horno, y con mucho cuidado, daremos la vuelta a los trozos de melón.
Introduciremos de nuevo la bandeja en el horno, dejándola 5 minutos más. Los reservaremos.
Elaboraremos la gelatina de vino dulce, poniendo a hidratar la hoja de gelatina en agua fría.
La escurriremos y la pondremos en un cazo, a fuego muy suave, hasta que se deshaga.
Retiraremos el cazo del fuego y le agregaremos el vino dulce, mezclándolo y reservándolo en un recipiente, para que cuaje y nos quede una gelatina muy delicada, para servirla en cucharadas.
Emplataremos los trozos de melón, repartiendo por encima el queso azul desmenuzado y unas cucharadas de gelatina de vino dulce.