Vamos a aprovechar el comienzo de la temporada de pimientos rojos. Hoy haremos una estupenda mermelada de pimientos. Esta mermelada es muy acertada para tostadas con queso de cabra y encima unas cucharaditas de ésta. También la podemos utilizar en un solomillo de cerdo con unas cebollas caramelizadas, el contraste es espectacular; en un entrante de morcilla, con queso curado y una cucharadita encima. Seguro que se os ocurren mil ideas.
Ingredientes
4 pimentos rojos.
azúcar la mitad del peso de pimientos asados
1 chorrito de vinagre de Módena.
1 pizca de sal.
Elaboración
Asaremos los pimientos rojos en el horno precalentado a 180ºC. durante 20 a 30 minutos.
Transcurrido ese tiempo, los retiraremos del horno y los envolveremos con papel de aluminio, dejándolos atemperar, durante 15 minutos.
Pelaremos los pimientos y les retiraremos las semillas.
Seguidamente pesaremos la carne de pimiento limpia, puesto que la mitad de su peso será la cantidad de azúcar que necesitaremos, para hacer la mermelada.
Pasaremos los pimientos por el pasapurés y los mezclaremos con el azúcar, 1 chorrito de vinagre de Módena y 1 pizca de sal.
Los pondremos a cocer en una cacerola, a fuego lento, durante unos 20 minutos, removeiéndolo muy a menudo, con una cuchara de madera.
Verteremos la mermelada en tarros herméticos de cristal esterilizados. Los cerraremos bien y los pondremos en una cazuela ancha, al baño María, durante unos 20 minutos.
Para evitar que choquen los tarrros entre si, pondremos trapos entre ellos , así evitaremos que puedan romperse.