Como pronto empezará la temporada de caza, podremos disfrutar del extraordinario sabor de las carnes de esta ave. No obstante, para estas fiestas navideñas, también suelen ofrecerlas en algunos de nuestros menús. A continuación pasaremos una receta muy tradicional de como se elaboran por tierras manchegas.
Ingredientes
Para 4 personas
4 perdices
1 cebolla grande
150 ml. de vino blanco seco
80 ml. de vinagre
50 ml. de aceite de oliva
15 granos de pimienta negra en grano
3 cabezas de ajo
sal
pimienta negra molida
5 hojas de laurel
Elaboración
Limpiaremos bien las perdices de plumas, les quitaremos las vísceras y las dejaremos en remojo, unas 8 horas en agua fría.
Ataremos las perdices con un cordel, las salpimentaremos y freiremos ligeramente en una cazuela de barro con el aceite de oliva (unos 15 minutos).
Retiraremos las perdices de la cazuela.
Pelaremos y cortaremos la cebolla en trozos gruesos y en el mismo aceite de freír las perdices, freiremos lentamente la cebolla (unos 20 minutos).
Estando la cebolla a medio freír, pondremos las cabezas enteras de ajos, los granos de pimienta y el laurel.
Pondremos de nuevo las perdices en la cazuela, añadiéndoles el vinagre, el vino blanco y la sal.
Las coceremos a fuego lento, cuidando de que la salsa no se reduzca.
Añadiremos más agua mineral, siempre que sea necesario.
Las dejaremos cocer durante unas 1 1/2 horas, siempre a fuego lento.
Podemos servirlas frías o calientes, decorándolas con una ramita de romero.