Esta es una de las pizzas más solicitadas, por su agradable sabor, gracias a los sabores que aportan los diversos ingredientes con que la rellenamos. Si vais a una pizzería de calidad con horno de leña, no dejéis de saborearla.
Ingredientes
100 cc. de agua tibia.
300 cc. de agua fría.
1 chorrito de aceite de oliva.
1 cucharadita de sal
3 cucharadas de aceite de oliva.
50 gr. de aceitunas negras sin hueso.
80 gr. de jamón cocido.
300 gr. de tomate triturado.
10 gr. de levadura.
500 gr. de harina.
120 gr. de mozzarella.
50 gr. de champiñones.
1 cucharada de alcaparras.
2 alcachofas en vinagre cortadas en láminas.
Elaboración
Prepararemos la masa, mezclando la levadura con la mitad del agua tibia y la dejaremos reposar en un lugar tibio, hasta que forme espuma.
En un cuenco mezclaremos un tercio de la harina con la sal y le incorporaremos el resto del agua tibia, los dos tercios del agua fría, el aceite de oliva y la levadura, mezclándolo todo, poco a poco.
Iremos añadiendo el resto de la harina, para que vaya absorbiendo todo el líquido, corrigiendo de agua si fuese necesario.
Cuando ya se halla formado como una bola, la pasaremos a una superficie enharinada y la amasaremos con los nudillos unos 10 minutos, incorporando la harina restante que se pueda, hasta formar una bola suave y elástica.
Pondremos entonces la masa en un bol ligeramente aceitado y la pincelaremos con aceite.
Cubriremos el bol con un paño y la dejaremos reposar a temperatura ambiente unas 2 horas.
Precalentaremos el horno a 220ºC.
Pasado ese tiempo, la volveremos a amasar un poco con los nudillos para eliminar el aire.
Podemos elaborar 4 pizzas individuales o hacer una grande. Si elaboramos cuatro, formaremos 4 bolas con la masa.
Con los dedos estiraremos la masa, hasta obtener una pizza redonda de 0,5 cm. de grosor como máximo, siendo este espesor ligeramente más alto en los bordes, para que pueda retener los ingredientes.
Cubriremos la pizza con el tomate triturado y la mozzarella desmenuzada y sobre ellos se disponen los ingredientes de forma que cada uno ocupe una cuarta parte de la pizza.
Una vez añadidos todos los condimentos a la pizza, ya estará lista para meterla en el horno precalentado, engrasando la plancha donde la depositaremos, para que no se pegue.
La rociaremos con un chorrito de aceite.
La hornearemos de 5 a 10 minutos dependiendo del grosor de la masa.