Vamos a elaborar unos raviolis, hechos con nuestras manos. Siempre van a ser mucho más sabrosos, que los que podamos adquirir en nuestros mercados. Un poco laboriosos, pero el resultado final es excelente, ya que el aporte de una deliciosa salsa al queso de Cabrales, los hace expectaculares .
Ingredientes
350 gr. de harina.
2 huevos.
1 clara de huevo.
1 cucharada de aceite de oliva.
1 cucharadita de sal.
relleno (al gusto).
Para la salsa:
150 gr. de queso de Cabrales.
1 yogur natural.
2 dientes de ajo.
2 cucharadas de aceite de oliva.
sal.
Elaboración
Mezclaremos la harina y la sal en un bol.
Formaremos un hoyo y echaremos en él los huevos, la clara de huevo y el aceite de oliva, trabajando y removiendo, hasta obtener la masa. Si fuese preciso podemos añadirle un poco de agua para que no resulte demasiado reseca.
La amasaremos envuelta en un papel antigrasa, durante 10 minutos, luego la dejaremos reposar 10 minutos en la nevera.
Extenderemos la masa con un rodillo y la cortaremos en 4 rectángulos grandes, 2 de ellos muy finos.
Pondremos cucharadas de relleno (al gusto) sobre uno de los rectángulos gruesos en intérvalos de unos 5 cm.
Mojaremos los bordes de la pasta y los espacios entre los montones de relleno.
Colocaremos 1 rectángulo fino encima y lo presionaremos con los dedos.
Los cortaremos formando los raviolis con el cortapastas dentado.
Prepararemos la salsa en una sartén con 2 cucharadas de aceite de oliva, rehogando los dientes de ajo picados.
Cuando tomen color, agregaremos el queso de Cabrales aplastándolo y removiéndolo, hasta obtener una crema suave.
La dejaremos enfriar y la mezclaremos con el yogur.
Herviremos los ravioli en abundante agua con sal, hasta que estén al dente (unos 10 minutos). Los escurriremos y mezclaremos con la salsa anterior. Servir de inmediato.