Este plato tiene su origen en tierras extremeñas. Son como unas albóndigas muy sencillas, que se elaboran con ingredientes muy simples, como el pan, cebolla, huevo y ajo, aromatizadas con el laurel. Una comida que solían consumir los pastores de esas tierras.
Ingredientes
Para 4 personas
6 huevos.
miga de pan (la que necesitemos).
2 dientes de ajo.
1 cebolla.
2 hojas de laurel.
perejil.
aceite de oliva.
sal.
pimienta negra molida.
Elaboración
Batiremos los huevos y los mezclaremos con la miga de pan desmenuzada en cantidad suficiente, para obtener una masa espesa, mezclándola con el ajo y el perejil, muy picados.
Pondremos en una sartén con abundante aceite caliente y con una cuchara iremos formando bolas de esta masa y las freiremos.
Una vez fritos los repápalos, los colocaremos en una cacerola.
En la misma sartén, retirándole la mayor parte del aceite, freiremos la cebolla, el ajo, el perejil y 2 hojas de laurel.
Lo cubriremos de agua mineral y cuando arranque a hervir, verteremos la salsa sobre los repápalos, dejándolos cocer, durante 15 minutos. Rectificaremos de sal y pimienta.
Apagaremos el fuego y los dejaremos reposar, durante 5 minutos.
Este plato es típico en la región de Extremadura.