Una deliciosa tarta a base de caquis, una fruta no muy apreciada por todos pero realmente deliciosa. La tendrían que tener en cuenta las personas mayores, los niños y los deportistas. La podemos comer a cualquier hora del día. Esta tarta es muy melosa y esponjosa.
Ingredientes
Para 6 personas
350 gr. de harina
250 gr. de mantequilla reblandecida
250 gr. de azúcar
1 limón (su ralladura).
1 huevo
1 pizca de sal
1 lata pequeña de leche condensada
1 clara de huevo a punto de nieve
3 caquis grandes
azucar glas
Elaboración
Batiremos la mantequilla con el azúcar, hasta conseguir una crema.
Agregaremos el huevo y la ralladura de limón.
Tamizaremos la harina con la sal y la incorporaremos poco a poco a la preparación anterior, mezclándola, sin amasar, con una espátula o cuchara de madera.
Formaremos un rollo y lo envolveremos con papel film, dejándolo durante 1 hora en el frigorífico.
Estiraremos la masa con un rodillo enharinado y forraremos una tartera engrasada con mantequilla y enharinada o con spray antiadherente .
Pincharemos el fondo con un tenedor y lo cocinaremos en el horno precalentado a 170ºC. durante 15 minutos.
Mientras se cocina la tarta, mezclaremos la leche con la clara de huevo montada a punto de nieve, con delicadeza y de forma envolvente.
Colocaremos caquis, pelados y cortados en gajos finos gajos, alrededor de la tarta precocinada, verteremos la mezcla de leche y la llevaremos al horno, hasta que se dore, unos 10 o 15 minutos.
La sacaremos del horno y la desmoldaremos y la dejaremos enfriar.
Espolvorearemos con abundante azúcar glas por encima.