Para disfrutarla en un buena sobremesa o para una deliciosa merienda, una tarta a base de una pasta que rellenaremos con una mezcla de almendra y datiles, aromatizado con el agua de azahar.
Ingredientes
Para la masa:
175 gr. de harina.
75 gr. de mantequilla.
1 huevo.
1 cucharada de agua mineral.
Para el relleno:
100 gr. de mantequilla.
100 gr. de azúcar en polvo.
1 huevo.
100 gr. de almendras picadas.
2 cucharadas soperas de harina.
2 cucharadas de agua de azahar.
14 dátiles frescos.
4 cucharadas de mermelada de albaricoque.
Elaboración
Precalentaremos el horno a 200ºC.
Tamizaremos la harina en un cuenco, añadiremos la mantequilla, trabajando la pasta con los dedos, hasta obtener una textura de pan rallado grueso.
Agregaremos el huevo y 1 cucharada de agua fría, trabajando la masa hasta conseguir una textura suave.
Estiraremos la masa sobre una superficie enharinada y forraremos un molde de 24 cm. de diámetro, con ella.
Pincharemos con un tenedor la base y la pondremos en el congelador durante 10 minutos.
Prepararemos el relleno, batiendo la mantequilla cortada en dados y el azúcar, seguidamente añadiremos el huevo batido, incorporando las almendras picadas, la harina y 1 cucharada de agua de azahar, mezclándolo todo bien.
Rellenaremos la base con esta mezcla, procurando de que quede bien repartida.
Colocaremos encima los dátiles cortado por la mitad y sin huesos, apoyados por la parte del corte.
Lo introduciremos en el horno poniéndola encima de una bandeja precalentada, durante unos 10 minutos.
Bajaremos el horno a 180ºC., dejándolo hornear 20 minutos más, hasta que cuaje y se dore.
Pasaremos la tarta a una rejilla y la dejaremos enfriar.
Calentaremos a fuego suave la mermelada de albaricoque y luego la pasaremos por un colador.
La mezclaremos con el resto de agua de azahar.
Con esta mezcla, pintaremos con un pincel la tarta.