Un bonito y jugoso bizcocho para presentar en la mesa como postre. Su textura es como borracha por el almíbar y el licor que le hemos puesto. También lo podemos presentar en una merienda.
Ingredientes
Para el bizcocho:
3 huevos.
250 gr. de azúcar glasé.
100 gr. de mantequilla derretida.
400 gr. de harina.
2 1/2 cucharaditas de levadura.
150 ml. de nata líquida.
Para la cobertura:
500 ml. de agua mineral.
100 gr. de azúcar glasé.
50 ml. de miel.
3 cucharadas de Grand Marnier.
zumo de limón.
frutas de bosque (frambuesas, grosellas, etc.).
nata montada azucarada. para decorar
Elaboración
Para el bizcocho:
Batiremos las yemas de huevo con el azúcar, hasta que estén cremosas.
Montaremos las claras de huevo a punto de nieve.
Mezclaremos la harina y la levadura.
Derretiremos la mantequilla y mezclaremos todo, las yemas y las claras.
Verteremos, poco a poco, la nata líquida, hasta obtener una pasta homogénea.
Engrasaremos un molde en forma de corona, vertiéndo en él la preparación anterior, introduciéndolo en el horno precalentado a 200ºC. durante unos 25 minutos.
Cuando esté listo, lo dejaremos enfriar y lo volcaremos, para desmoldarlo.
Para la cobertura:
En un cazo, mezclaremos el agua, el azúcar y la miel, dejándolo cocer unos minutos.
Una vez frío, le añadiremos el licor y algo de zumo de limón.
Echaremos parte de este líquido en el molde, metiendo de nuevo el bizcocho, ya frío.
Lo pincharemos varias veces y verteremos el resto del líquido, para que lo absorba totalmente.
Una vez lo haya absorbido todo, lo volvermos a volcar sobre una bandeja redonda de servir, decorándolo con las frutas del bosque y la nata montada.