Una bullabesa sencilla en la que el bacalao es el único pescado que incluiremos en su elaboración. El resultado es muy sabroso y sorprendente.
Ingredientes
750 gr. de filetes de bacalao.
100 gr. de cebollas.
50 gr. de puerros. (solo la parte blanca)
2 tomates maduros.
1 diente de ajo.
100 ml. de vino blanco seco.
500 ml. de fumet de pescado. (opcional agua mineral)
unas hebras de azafrán
3 cucharadas soperas de aceite de oliva.
pimienta negra recién molida.
1 cucharada grande de perejil.
sal.
Elaboración
Desalaremos los filetes de bacalao, cambiando el agua varias veces. Después, los cortaremos en trozos cuadrados.
En una cacerola con aceite de oliva, pocharemos, sin dejar que se doren, las cebollas y la parte blanca de los puerros, ambos picados, a fuego lento.
Cuando estén bien transparentes, añadiremos los tomates, pelados, despepitados y triturados, y el diente de ajo majado, dejándolos cocer durante 5 minutos, a fuego vivo.
Verteremos el vino blanco y el fumet de pescado (si no disponemos de él, podemos emplear agua mineral, aunque es mejor el primero)) y unas hebras de azafrán, dejándolo que hierva.
Incorporaremos el bacalao, ya escurrido, en esta cocción, regándolo con 3 cucharadas soperas de aceite de oliva. Comprobaremos la salazón.
Sazonaremos con pimienta negra recién molida, continuando la cocción, a fuego vivo, con la cacerola tapada, durante unos 25 minutos.
En el último momento, agregaremos 1 cucharada grande de perejil cortado con las tijeras.
Pondremos en una sopera la bullabesa. La serviremos, acompañada con unas rebanadas de pan, secadas en el horno o tostadas.
Nota: También pueden servirse por separado, el caldo con rebanadas de pan casero, y el bacalao dispuesto en una fuente honda.