Este plato es muy típico de las tierras ampurdanesas. Una receta mezcla de mar y montaña, en que se combina unas albóndigas, sean de carne o no, con mariscos.
Ingredientes
Para 4 personas
Para las albóndigas:
1 rebanada de pan del día anterior.
300 gr. de tocino ibérico.
3 dientes de ajo.
1 ramito de perejil.
1 huevo.
harina (la necesaria).
sal.
pimienta negra molida.
Para el resto de la elaboración:
8 cigalas grandes.
16 mejillones.
1 cebolla mediana.
1 tomate maduro.
200 ml. de vino blanco seco.
agua mineral.
aceite de oliva virgen extra.
sal.
pimienta negra molida.
1 cucharada de harina.
1 cucharada de salsa alioli.
Elaboración
Desmenuzaremos la rebanada de pan del día anterior, agregándole el tocino picado fino, el diente de ajo y el perejil picados muy finos y el huevo. Lo salpimentaremos y lo amasaremos bien con un poco de harina, formando con las manos, albóndigas de la medida que nos apetezca.
Las freiremos en una sartén con aceite de oliva, dejándolas escurrir sobre papel absorbente, reservándolas.
En una cazuela con aceite de oliva, rehogaremos ligeramente las cigalas (unos 3 minutos), reservándolas aparte.
En el mismo aceite, pocharemos la cebolla, pelada y picada, hasta que esté dorada (unos 15 minutos).
Verteremos el vino blanco, dejándolo evaporar unos minutos.
Incorporaremos el tomate rallado, sin piel y sin semillas.
Lo espolvorearemos con harina y lo cubriremos con agua mineral.
Cuando arranque el hervor, agregaremos las cigalas, los mejillones, la sal, la pimienta y las albóndigas, dejándolo cocer todo, durante unos 10 minutos.
En un bol, pondremos 1 cucharada de salsa alioli y 4 cucharadas del caldo de la cazuela, diluyéndolos bien.
Lo verteremos en la cazuela, dejándolo cocer 2 minutos más.