En todo el sudeste asiático, la carne de cerdo es muy apreciada, por lo que tenemos infinidad de recetas. Esta vez vamos a cocinar una de las partes más jugosas y de mejor sabor del cerdo, la babilla o también llamada tetilla. Es una pieza de forma oval que está junto a la cadera. Le diremos a nues tro proveedor que nos la abra, para luego enrollarla y atarla.
Ingredientes
Para 4 personas
1,3 kg. de babilla de cerdo, atada para asar
1 vasito de jerez seco
1 lata de piña
1 diente de ajo
1 cucharada de maicena
1 cucharada de vinagre
1 cucharada de salsa Worcestershire
5 cucharadas de mantequilla
2 cucharadas de salsa de soja
2 cucharadas de miel
2 cucharadas de jenjibre en polvo
1 pizca de pimienta negra
1 pizca de sal
80 gr. de harina
2 pimientos verdes
Elaboración
En un plato, mezclaremos la harina con el jengibre y rebozaremos el trozo de cerdo atado.
En una sartén pondremos mantequilla o aceite y doraremos el cerdo.
Una vez dorado, lo colocaremos en una fuente de horno.
Verteremos un poco de grasa de la sartén por encima.
Lo hornearemos a 180ºC. durante 90 a 120 minutos.
A media cocción, le añadiremos el zumo de la piña y el jerez.
Trocearemos la piña y los pimientos en tiritas, agregándolos al asado.
Cuando la carne esté tierna, la sacaremos del horno, con la piña y las tiritas de pimiento.
La salsa, la pondremos en una cacerola al fuego, para que se reduzca un poco.
Pondremos en la cazuela, la salsa de soja, la miel, el ajo picado, el vinagre, la salsa Worcestershire, la sal y la pimienta.
En un vasito, con agua mineral fría, desleiremos la maicena, agregándola a la salsa, para que ésta espese, sin dejar de remover.
Serviremos el cerdo asado, cortado en lonchas con la piña y el pimiento.
La salsa, muy caliente, la serviremos aparte, en una salsera, acompañándola de arroz blanco y lombarda hervida, opcionalmente.