¡Fantástica!, es como podemos definir esta charlota de fresones, algo laboriosa, pero con un resultado que hará las delicias de vuestros invitados.
Ingredientes
Para 6 personas
4 hojas de gelatina.
300 gr. de fresones.
100 gr. de frambuesas.
100 gr. de azúcar en polvo.
1 cucharada sopera de crema de frambuesas.
1/2 limón (su zumo).
250 ml. de nata para montar.
20 biscochos de soletilla.
hojas de menta fresca.
Elaboración
Remojaremos las hojas de gelatina, durante 10 minutos, en agua fría.
Lavaremos los fresones y mezclaremos 200 gr. de ellos con el azúcar, la crema de frambuesa y el zumo de limón.
Verteremos 2 cucharadas de la preparación anterior en un cazo, llevándola a ebullición y retirándolo del fuego.
Disolveremos en ella la gelatina, bien escurrida.
Incorporaremos el resto de la preparación, removiéndola, hasta disolver bien la gelatina.
Montaremos la nata (recordad que debe estar bien fría de la nevera) e incorporaremos la preparación anterior y la mitad del resto de fresones; la masa tiene que ser muy homogénea.
Cubriremos el fondo de un molde para charlotas, con papel sulfurizado.
Repartiremos los bizcochos de soletilla por el contorno del molde, poniendo la parte abombada, hacia el exterior.
Seguidamente, llenaremos el molde con la preparación anterior, dejándolo en la nevera, unas 12 horas.
Sacaremos la charlota del molde y la serviremos en un plato frío, decorada con hojas de menta fresca.
Retiraremos el papel y decoraremos la parte superior con unas frambuesas.
Servirla muy fría.