Deliciosa combinación de chocolates a los que aplicaremos diferentes formas y sabores, que complementaremos como una crema helada de queso Idiazabal, un queso potente y con su aroma ahumado, que nos hará las delicias, además de una crema de menta.
Ingredientes
Para 4 personas
200 gr. de chocolate de cobertura.
50 gr. de chocolate blanco.
fresas.
hojas de menta.
Para la crema helada de queso:
1/2 l. de leche.
100 ml. de nata.
2 terrinas de 200 gr. de queso fresco.
200 gr. de queso Idiazabal rallado.
Para la crema de menta:
200 gr. de menta en rama.
250 gr. de nata.
Para la salsa de chocolate:
150 gr. de chocolate de cobertura.
200 ml. de leche.
50 gr. de cacao en polvo.
Elaboración
Calentaremos al baño María el chocolate de cobertura y el blanco, hasta que su consistencia pueda manejarse, para poder formar los moldes circulares que deseemos, con la ayuda de un vaso, dejándolos enfriar.
Preparemos la crema de queso, triturando en la batidora, el queso fresco, el queso de Idiazabal rallado, la nata y la leche.
Una vez bien triturados, pondremos el recipiente en otro mayor con hielo, batiéndolo con las varillas, introduciéndolo en el congelador, raspándolo con un tenedor cada 30 minutos, para romper los cristales de hielo.
Para hacer la crema de menta, trituraremos la menta con la nata. Repetiremos la operación anterior, batiéndola en frío, hasta conseguir una masa cremosa.
Haremos la salsa de chocolate, hirviendo en un cazo la cobertura de chocolate y el cacao, sin dejar de remover.
Desmoldaremos los moldes de chocolate, colocándolos en los platos de servir, rellenándolos con la crema de menta.
Colocaremos unas cucharadas de crema helada de queso.
Finalmente, verteremos la salsa de chocolate y adornaremos las cucharadas de crema helada de queso con fresas y unas hojitas de menta fresca.