Este es un plato típicamente canario. Consiste en adobar primero el conejo, para luego guisarlo con todos los ingredientes señalados y los líquidos del adobo. como que la carne de conejo, de por sí, es un poco sabrosa, siempre debemos cocinarlo bien condimentado.
Ingredientes
Para 4 personas
1 conejo grande troceado.
1/2 cabeza de ajos.
1 ramita de orégano.
1 ramita de tomillo.
1 hoja de laurel.
10 granos de pimienta negra.
200 ml. de vinagre de vino.
3/4 l. de vino blanco seco.
200 ml. de aceite de oliva.
50 gr. de pimentón dulce.
25 gr. de almendras tostadas.
1 rebanada de pan.
sal.
pimienta negra molida
Elaboración
En una cazuela grande, pondremos los trozos de conejo, salpimentados, espolvoreándolos con el pimentón.
Incorporaremos los dientes de ajo aplastados, con su piel, las hierbas aromáticas y los granos de pimienta.
Lo cubriremos con aceite de oliva, el vino blanco y el vinagre, dejándolo macerar, durante 24 horas.
Una vez macerado, freiremos el conejo en una sartén con aceite, pasándolos a una cazuela.
Aprovecharemos el aceite que ha quedado de freír el conejo, para freír el pan y el higadillo del conejo.
Cubriremos el conejo con el caldo del adobo, colado, dejándolo cocer tapado, a fuego lento, hasta que el conejo esté tiernos, unos 30 minutos.
Unos minutos antes de terminar la cocción, agregaremos la picada, que haremos con las almendras, el pan frito y el higadillo, desleídos con un poco del caldo de la cocción.