Una sabrosa preparación de unas costillas de cerdo. Primero las marinaremos con la mezcla de mostaza y cerveza. Después daremos dos pasos, priemro las freiremos y luego las acabaremos en el horno rociadas con los jugos de la maceración, junto con unos puerros y unas zanahorias.
Ingredientes
Para 4 personas
1 kg. de costillas de cerdo.
1/2 kg. de puerros.
3 zanahorias.
200 ml. de cerveza.
1 cucharada de mostaza.
aceite.
sal.
pimienta negra molida.
Elaboración
Lavaremos las costillas de cerdo debajo del chorro del grifo y las secaremos con papel absorbente.
Mezclaremos la mostaza con el vaso de cerveza.
Pondremos las costillas en un recipiente hondo y las regaremos con la mezcla anterior, dejándolas macerar durante unas 4 horas.
Transcurrido ese tiempo, las escurriremos y las espolvorearemos con sal y pimienta, reservando el líquido de la maceración.
En una sartén, pondremos 2 cucharadas de aceite y doraremos las costillas por todos los lados, colocándolas luego, en una fuente refractaria.
Cuando estén todas las costillas fritas, las regaremos con los jugos que hayan quedado en la sartén de freírlas.
Precalentaremos el horno a 200º C.
Introduciremos la fuente en el horno, vertiendo de vez en cuando el adobo anterior, rebajado con 1/2 taza de agua mineral.
Pelaremos las zanahorias y las cortaremos a cuadritos.
Limpiaremos los puerros y los cortaremos en rodajas.
A los 20 minutos del asado, incorporaremos las zanahorias y los puerros, dejándolos 2 0 minutos más.
Servir de inmediato.