Uno de los estofados de ternera más clásicos. Tan solo debemos tener paciencia en su cocción, por ser un poco larga, pero el resultado podéis comprobarlo después. Variedad de sabores, aromas y texturas, para que decir más.
Ingredientes
400 gr. de ternera (de la paletilla, del pecho o de la aguja).
1 kg. de patatas.
1 cebolla.
2 zanahorias.
100 gr. de guisantes.
3 dientes de ajo.
2 vasos de caldo de carne. (400 ml.)
1/2 vaso de vino blanco seco. (100 ml.)
1 cucharada de tomate concentrado.
1 ramillete de hierbas aromáticas (tomillo, romero y laurel).
1 ramillete de perejil.
pimienta negra molida.
sal.
aceite de oliva
Elaboración
Pelaremos y picaremos finamente la cebolla, los ajos y el perejil.
Pelaremos y cortaremos las patatas en dados.
Rasparemos, lavaremos y cortaremos las zanahorias en rodajas gruesas.
En una cazuela con aceite, rehogaremos la cebolla a fuego lento, unos 20 minutos.
Incorporaremos la carne cortada en dados y la doraremos, sin dejar de remover.
Verteremos el vino blanco, dejándolo cocer unos 5 minutos, hasta que se evapore el alcohol.
Añadiremos el tomate concentrado y los ajos picados, dejándolo cocer 5 minutos más.
Incorporaremos la mitad del caldo de carne.
Agregaremos las hierbas aromáticas y salpimentaremos al gusto.
Taparemos la cazuela y la dejaremos cocer, a fuego muy lento, durante 60 minutos.
Añadiremos un poco más de caldo de carne, continuando la cocción 30 minutos más.
Incorporaremos las patatas, los guisantes y las zanahorias, removiéndolo para que se mezclen bien.
Taparemos de nuevo la cazuela, dejándola cocer de nuevo, hasta que las patatas estén blandas (unos 15 minutos).
Retiraremos el ramillete de hierbas aromáticas y pondremos el contenido de la cazuela en una fuente de servir, espolvoreándolo por encima con el perejil picado.