Una sabrosa elaboración, en la que guisaremos una gallina troceada, con una carne más sabrosa que la del pollo, guisada al estilo de como lo hacen por las tierras de Guadalajara.
Ingredientes
Para 4 personas
1 gallina limpia, de unos 1,5 kg.
100 ml. de aceite de oliva.
1 cebolla grande.
2 dientes de ajo.
1 cucharada de harina.
200 ml. de vino blanco seco.
3 yemas de huevo cocidas.
10 almendras tostadas.
hebras de azafrán.
sal.
pimienta negra molida.
Elaboración
Cortaremos la gallina en 10 o 12 trozos y los rehogaremos en una sartén con aceite de oliva, previamente salpimentados.
Una ver rehogados los trozos los pasaremos a una cazuela de barro.
En el mismo aceite de freír la gallina, rehogaremos la cebolla picada, los dientes de ajo y luego le agregaremos la cucharada de harina.
Lo remojaremos con el vino blanco y lo pasaremos por el chino.
A continuación se vierte en la cazuela sobre los trozos de gallina, dejándolos cocer lentamente, durante 2 horas.
En un mortero, haremos un majado con las yemas de huevo cocidas, un poco de azafrán y las almendras peladas y tostadas.
Lo desleiremos con un poco de caldo (si no disponemos de caldo, emplearemos agua mineral), incorporándolo al guiso cuando la gallina esté casi hecha, dejándolo cocinar unos 5 minutos más.
Una vez en su punto, la presentaremos en la misma cazuela.