El helado de castaña es un postre muy original, que se elabora mezclando las castañas con helado de vainilla, aunque podemos emplear helados que más os gusten. Después lo bañaremos con una crema de vainilla, adornado todo con ramitas de canela.
Ingredientes
500 gr. de castañas
500 ml. de helado de vainilla
100 gr. de azúcar
4 ramitas de canela
Para la crema de vainilla:
300 ml. de leche desnatada
3 yemas de huevo
1 vaina de vainilla
3 cucharadas de azúcar granulado
Elaboración
Pelaremos las castañas y las coceremos con 1/2 l. de agua y el azúcar. No las retiraremos del fuego, hasta que el agua se reduzca.
A continuación batiremos las castañas, hasta obtener un puré fino. Lo dejaremos enfriar en el congelador, unos 30 minutos.
Una vez frío el puré, lo mezclaremos con el helado de vainilla y lo volveremos a guardar en el congelador.
Cuando haya pasado 30 minutos, lo sacaremos y rasparemos con un tenedor o lo volveremos a batir con la batidora, guardándolo de nuevo en el congelador, 1 o 2 horas más.
Mientras, haremos la crema de vainilla, calentando en un cazo, a fuego suave, la leche con la vaina de vainilla, que hemos abierto con la punta de un cuchillo, raspando su pulpa y semillas, agregándolas a la leche.
En otro cazo, batiremos las yemas de huevo y verteremos, poco a poco, la leche anterior, sin dejar de remover, poniéndolo al fuego, hasta que que empiece a espesar.
Cuando haya espesado, añadiremos el azúcar.
Presentaremos el postre, poniendo en sendas copas 1 o 2 bolas de helado de castaña, que cubriremos con la crema de vainilla y decoraremos con las ramitas de canela.