Este tipo de platos lo solemos encontrar en los países del norte de África. Pueden ofrecerse como primer y segundo plato, por los ingredientes que lleva, en este caso pollo, garbanzos y patatas entre otros, muy aromatizados y con agradables sabores.
Ingredientes
Para 4 personas
8 contramuslos de pollo, sin piel y sin hueso
2 cebollas
2 dientes de ajo
2 cucharadas de harina
900 ml. de caldo de pollo
1 limón (su ralladura y su zumo)
1/2 cucharadita de azafrán
1 trozo de canela en rama
2 botes de 410 gr. de garbanzos escurridos
500 gr. de patatas
2 cucharadas de aceite de oliva
sal
pimienta negra molida
Para decorar:
mezcla de perejil y menta picados
Para acompañar:
panes de pita calientes (opcional)
Elaboración
Calentaremos en una sartén grande los contramuslos de pollo cortados en trozos grandes y las cebollas, peladas y cortadas en juliana fina. Los freiremos, (si es necesario por tandas), durante 5 minutos, hasta que estén dorados.
Sin dejar de remover, incorporaremos los dientes de ajo, pelados y picados finos. A continuación la harina.
Verteremos el caldo de pollo, agregando la ralladura y el zumo de limón, el azafrán, el trozo de canela partida por la mitad, sal y pimienta negra, llevándolo todo a ebullición. Lo pasaremos a una cacerola que pueda ir al horno o en un tajín
Añadiremos los garbanzos escurridos y las patatas, peladas y troceadas, lo removeremos, taparemos y lo llevaremos al horno precalentado a 180ºC., durante 2 horas.
Acabada la cocción, lo removeremos y decoraremos con la mezcla de perejil y menta picados.
Servirlo en platos hondos, acompañándolos opcionalmente con panes de pita calientes.