Cuando viajo por el País Vasco, un día lo dedico a este plato, sean de merluza o de bacalao. Nosotros vamos a pasar esta receta, sencilla, pero con la paciencia de hacer un buen pil-pil. Las de bacalao, las podemos comprar saladas, desaladas o frescas. Las primeras las tendremos en remojo, de la misma manera que le dedicamos al bacalao. Las segundas, las volveremos a tener en remojo, puesto que no acaban de estar desaladas. Si tenemos la suerte de encontrar frescas, serán las mejores, ya que lograremos un pil- pil mejor, pues contendrán más gelatina.
Ingredientes
Para 4 personas
800 gr. de kokotxas de bacalao
1 cabeza de ajos
2 guindillas
perejil fresco
sal
pimienta blanca molida
aceite de oliva virgen extra
Elaboración
Si hemos comprado las kokotxas desaladas, las tendremos unas 6 horas en remojo. Si son frescas no será necesarios. Las lavaremos y eliminaremos pieles.
Pelaremos los dientes de ajo y los cortaremos en láminas.
Cortaremos las guindillas en rodajas pequeñas.
Los freiremos en una cazuela con abundante aceite de oliva de calidad.
Cuando empiecen a dorarse, le añadiremos un poco de perejil, durante un par de minutos. Los reservaremos aparte.
Dejaremos que el aceite se enfríe.
Cuando esté tibio añadiremos las kokotxas salpimentadas y, a fuego suave, iremos dándole movimientos giratorios a la cacerola, para que se vaya soltando la gelatina.
Cuando la salsa esté lograda, incorporaremos los ajos y las guindillas reservadas, espolvoreando por encima con perejil fresco picado. Lo serviremos de inmediato en la misma cazuela.