Otra receta que podemos incluir en nuestros menús navideños, si el bolsillo nos lo permite. Haremos unas langostas con un sabor añadido muy agradable. Un plato de verdadero gourmet.
Ingredientes
Para 6 personas
3 langostas de unos 800 gr. cada una.
50 gr. de queso emmental rallado.
perejil o perifollo.
Para la salsa:
1 zanahoria grande.
2 cebollas.
1/4 l. de vino blanco seco.
1 manojito de hierbas aromáticas (laurel, tomillo, perejil).
100 gr. de mantequilla.
350 gr. de crustáceos (cangrejos de mar, cabezas de cigalas o langostinos).
250 gr. de champiñones.
2 latitas de trufa.
Para la salsa bechamel:
3 dl. de leche.
25 gr. de harina.
25 gr. de mantequilla.
Elaboración
Prepararemos las langostas para ser hervidas, atándoles las patas. Las escaldaremos en agua hirviendo, a la que le hemos añadido un puñado de sal, dejándolas cocer, durante 7 minutos.
Una vez cocidas, les retiraremos el hilo. Las partiremos por la mitad, longitudinalmente y retiraremos con cuidado la carne de ambos lados así como la de las patas. La cortaremos a medias rodajas.Machacaremos el coral con la mantequilla. Reservarlas.
Calentaremos en una cazuela un poco de aceite y freiremos los crustáceos o las cabezas. Los retiraremos y en el mismo aceite, rehogaremos las cebollas y las zanahorias cortadas a láminas, durante unos 10 a 15 minutos.
Añadiremos el manojo de hierbas aromáticas y lo rociaremos con el vino blanco, dejándolo cocer lentamente.
Machacaremos los crustáceos o las cabezas, añadiéndolos a la cazuela. La taparemos y la dejaremos cocer, a fuego lento, durante 20 minutos.
Pasaremos la salsa por el chino.
Con la mantequilla, la harina y la leche, haremos una salsa bechamel y la mezclaremos con la salsa anterior, junto con la mantequilla batida con los corales de las langostas.
Cortaremos los champiñones en láminas, salteándolos en una sartén con un poco de mantequilla, a fuego vivo.
Cortaremos las trufas a trocitos y las agregaremos a las salsa, junto con los champiñones.
Colocaremos esta salsa en el interior de los medios caparazones de langosta, que habremos colocado sobre una fuente de horno, repartiendo por encima los trozos de carne de langosta, cubriéndolos con el resto de la salsa y espolvoreándolos con el queso rallado.
Los introduciremos en el horno precalentado, para gratinarlos ligeramente.
Las serviremos en una fuente alargada, decoradas con perejil o perifollo.