Este plato, lo hemos querido hacer más económico, ya que vamos a emplear langostinos congelados. Claro está, si escogemos frescos, el precio se dispara. Es fácil de cocinar esta receta, ya que solo los saltearemos, a abiertos por la mitad en una sartén con ajo picado y luego los rociaremos con el whisky.
Ingredientes
Para 6 personas
30 langostinos congelados de tamaño regular.
2 dl. de whisky.
2 dientes de ajo.
1 1/2 dl. de aceite de oliva.
1 rama de perejil.
sal.
Elaboración
Cuando los langostinos estén aún duros, les haremos un corte a lo largo, de cabeza a la cola, dejando las dos mitades unidas por la cola.
Sazonaremos con sal y los reservaremos.
En una cazuela, pondremos el aceite y los dientes de ajo trinchados muy finos.
Cuando empiecen a dorarse, pondremos los langostinos con el caparazón hacia abajo y las colas hacia el centro de la cazuela.
Los regaremos con el whisky y, cuando la carne empiece a tomar un color blanquecino, los espolvorearemos con perejil picado.
Iremos moviendo la cazuela en sentido de vaivén, para que engorde la salsa.
Cuando la carne esté bien blanca, los caparazones rojos y las colas empiecen a levantarse, es el momento de servirlos.