Sabrosas natillas, que haremos de la forma tradicional, únicamente que además le añadiremos avellanas picadas, para encontrarnos esa textura y sabor de la avellana. Las acompañaremos con unas avellanas garrapiñadas. Un po stre que tiene poca dificultad en su elaboración.
Ingredientes
1 l. de leche.
250 gr. de azúcar.
9 yemas de huevo.
4 ramitas de canela.
200 gr.de avellanas picadas.
hojas de menta.
grosellas.
Para las avellanas garrapiñadas:
125 gr. de avellanas.
125 gr. de azúcar.
1 cucharada de zumo de limón.
mantequilla.
Elaboración
En un cazo, pondremos a calentar 1/2 l. de leche, añadiendo 175 gr. de azúcar, las ramitas de canela y las avellanas molidas, mezclándolo bien, a fuego lento, hasta que arranque el hervor.
En un cuenco, pondremos el resto del azúcar, la leche fría y las yemas de huevo. Lo mezclaremos bien.
Le añadiremos un poco de leche tibia, sin dejar de remover.
Lo verteremos al cazo anterior, dejándolo cocer a fuego suave unos 5 minutos más, sin dejar que hierva y sin dejar de remover. Lo retiraremos del fuego, dejándolo enfriar.
Para las avellanas garrapiñadas, haremos el caramelo con los 125 gr. de azúcar que pondremos en una sartén a fuego suave, junto con unas gotas de zumo de limón. Cuando tome color blanquecino, sin que se dore, incorporaremos las avellanas enteras peladas, mezclándolas bien con el caramelo con una cuchara de madera, hasta que estén bien caramelizadas.
Extenderemos una hoja de papel de aluminio, untándola con mantequilla, en ella extenderemos las garrapiñadas para que queden sueltas.
Después nos pondremos unos guantes de plástico, nos los untaremos con mantequilla y acabaremos de soltar las garrapiñadas con cuidado, dejándolas enfriar.
Serviremos las natillas en boles individuales decorándolos con unas hojas de menta y unas grosellas, al lado pondremos unas bandejitas con las avellanas garrapiñadas.