Deliciosos pastelitos que podemos utilizarlos como postre o sencillamente para una degustación entre amigos a media tarde.
Ingredientes
6 boniatos medianos o 4 grandes
Para la masa:
450 gr. de harina
3 copas de zumo de naranja recién eprimidas
450 gr. de mantequilla derretida
450 gr. de manteca de cerdo derretida
2 cucharadas de brandy
Para el relleno:
8 cucharones de puré de boniato
3 cucharadas de azúcar
cáscara de naranja rallada
5 cucharaditas de canela molida
aceite de maíz para freir
1 copa de azúcar mezclada con 1 cucharita de canela
azúcar glasé (opcional)
Elaboración
Lavaremos los boniatos con piel y los coceremos en una olla grande con agua, hasta que estén blandos (unos 20 minutos). Los escurriremos y pelaremos.
Los pasaremos por el pasapurés.
Pondremos el puré en un bol, lo taparemos y dejaremos toda la noche en el refrigerador, para que suelte el agua.
Prepararemos la masa, poniendo la harina en un bol grande.
Haremos un hueco en el centro y en él echaremos la mantequilla y la manteca de cerdo derretida y el brandy.
Amasaremos todo junto y luego añadiremos el zumo de naranja.
Cuando la masa esté terminada, la dejaremos reposar mientras preparamos el relleno.
Preparemos el relleno, escurriendo bien el puré de boniato.
Luego lo mezclaremos con la ralladura de la naranja y el azúcar.
Cogeremos la masa y con un rodillo haremos unas láminas finas.
Con la ayuda de 1 copa, haremos círculos de unos 8 cm. de diámetro.
Pondremos 1 cucharada de relleno en el centro del círculo y doblaremos la masa desde los bordes hacia el centro y sellarlo, dándole la forma de una empanadilla.
Los freiremos en una sartén con aceite de maíz, hasta que estén dorados.
Los colocaremos en una fuente de servir, espolvoreándolos, aun calientes, con la mezcla de azúcar y canela. También podemos espolvorearlos con azúcar glacé.
Si los queremos hacer más sencillos, podemos emplear láminas para empanadillas, de esta manera nos ahorramos el tiempo de preparación, aunque no serán tan sabrosos.