Le diremos a nuestro proveedor habitual que nos saque unos filetes de los rodaballos, que como son de ración, podemos hacerlos en cualquier época del año. Con las espinas, podemos reservarlas para elaborar otro día un fumet. Después los coceremos al vapor y acompañaremos con una salsa de chalotes, unos mejillones y unas bolas de melón francés. Gratificante combinación de sabores y texturas.
Ingredientes
Para 4 personas
8 filetes de rodaballo.
1 melón tipo francés.
3 chalotes.
1 copa de vino blanco.
50 ml. de nata líquida.
25 gr. de mantequilla.
perejil.
tomillo.
1 hoja de laurel.
sal.
pimienta negra.
Elaboración
Con la ayuda de un sacabolas, vaciaremos el melón, haciendo bolitas, reservándolas.
Limpiaremos los mejillones y los pondremos en una cazuela, a fuego fuerte, junto con los chalotes, el tomillo, la hoja de laurel y 1 ramito de perejil.
Lo regaremos con el vino blanco, dejándolos cocer, hasta que los mejillones se abran.
Sacaremos los mejillones, retirándolos de sus conchas, y colaremos el caldo, poniéndolo de nuevo al fuego, para reducirlo.
Incorporaremos la nata líquida, salpimentaremos y ligaremos la salsa con la mantequilla, sin dejar de remover.
Coceremos los filetes de rodaballo al vapor ( se recomienda poner algas en el agua) durante 4 minutos, a partir de que arranque el hervor.
Presentaremos el plato, poniendo en el fondo la salsa, encima los filetes de rodaballo, acompañados de los mejillones y de las bolas de melón