Con unos buenos y jugosos solomillos de cerdo, vamos a preparar esta sabrosa receta. Primero maceraremos las ciruelas pasas con el vino blanco. Después de dorar los solomillos, los guisaremos con un caldo, con el que haremos una salsa con la nata y la jalea de grosellas.
Ingredientes
Para 4 personas
2 solomillos de cerdo enteros.
12 ciruelas pasas.
200 ml. de vino blanco seco.
1 cubito de caldo concentrado.
1/4 l. de agua mineral.
2 cucharadas de jalea de grosella.
1 bote de nata líquida. (200 ml.)
aceite de oliva.
sal.
pimienta negra molida.
Elaboración
Pondremos las ciruelas en remojo con el vino blanco durante un par de horas.
Disolveremos el cubito de caldo en 1/4 l. de agua mineral caliente.
Sazonaremos los solomillos con sal y pimienta y los doraremos en una cazuela con aceite.
Una vez doradas las retiraremos, y añadiremos el vino de la maceración, dejándolo cocer, hasta que se haya reducido a la mitad.
Verteremos el caldo y pondremos de nuevo la carne, dejándola cocer, a fuego suave, durante 20 minutos.
Agregaremos la nata, la jalea de grosella y las ciruelas, dejándolas cocer, durante 5 minutos más.
Emplataremos, cortando los solomillos en lonjas, regadas con la salsa y adornadas con las ciruelas