Unas sopas, como estas, son muy gratificantes. Fácil de elaborar y muy económicas, puesto que hemos aprovechado el pan que nos ha sobrado del día anterior. Después, con unas espinacas frescas, amén del huevo batido que verteremos por encima, salen unas sopas muy sabrosas.
Ingredientes
1 l. de agua mineral.
2 pastillas de caldo de pollo.
4 dientes de ajo.
1/2 barra de pan del día anterior.
1/2 kg. de espinacas frescas.
2 huevos.
sal.
aceite de oliva.
queso rallado (opcional).
Elaboración
Cortaremos el pan en rebanadas finas, tostándolas en el horno.
Disolveremos 2 pastillas de caldo de pollo en 1 l. de agua caliente.
Coceremos las espinacas con un poco de agua y sal. Luego las escurriremos bien.
En una cazuela, que pueda ir al horno, freiremos los ajos con un poco de aceite, luego pondremos en capas alternadas, primero las rebanadas de pan tostado y encima la de espinacas.
Seguidamente verteremos el caldo caliente.
Lo cubriremos con los huevos batidos.
Introduciremos la cazuela en el horno precalentado a 200ºC., dejándolo cocer durante 10 minutos.
Podemos, opcionalmente, espolvorearlo con queso rallado.