Nuestra repostería es reconocida internacionalmente, por su gran variedad de recetas. Nosotros añadiremos una más, una tarta de crema con fresones glaseados. Además, como disponemos de invernaderos, podemos disfrutar de ellas casi todo el año.
Ingredientes
Para 6 personas
250 gr. de pasta quebrada.
700 gr. de fresones.
Para la crema pastelera:
100 gr. de azúcar.
50 gr. de harina.
1/2 l. de leche entera.
6 yemas de huevo.
unas gotas de esencia de vainilla.
1 cucharada de kirsch.
Para el glaseado de albaricoque:
4 cucharadas de mermelada de albaricoque.
1 cucharada de agua mineral.
1 cucharada de zumo de limón.
Elaboración
Precalentaremos el horno a 180?°C.
Extenderemos la pasta quebrada con el rodillo y forraremos con ella un molde de tartas, previamente engrasado con mantequilla.
Pincharemos la base con un tenedor, introduciéndola en la nevera unos minutos, para que adquiera dureza, antes de hornearla.
Cubriremos el fondo con un disco de papel de aluminio, llenándolo de garbanzos, para que no se hinche la pasta al cocerla.
La introduciremos en el horno, durante unos 30 minutos, hasta que la pasta esté dorada.
La sacaremos del horno, dejándola enfriar.
Prepararemos la crema pastelera, mezclando en un bol, el azúcar, la harina y la esencia de vainilla.
Añadiremos un poco de leche y las 6 yemas de huevo, batiéndolo todo, hasta que esté bien mezclado.
Incorporaremos el resto de la leche, ya caliente, poniéndolo a cocer, a fuego lento y sin dejar de remover, hasta que la crema espese. No la dejaremos hervir. La retiraremos del fuego, poniéndola en otro recipiente y dejándola enfriar.
Agregaremos el kirsch a la crema y rellenaremos con ella el fondo de la pasta quebrada.
Lavaremos los fresones, partiéndolos por la mitad, colocándolos encima de la crema.
Prepararemos el glaseado de albaricoque, calentado en un cazo la mermelada de albaricoque con 1 cucharada de agua.
Añadiremos el zumo de limón y lo pasaremos por el colador.